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¿Qué es un lunes negro y por qué hoy es uno?

Un "Lunes Negro" es un término utilizado en el ámbito financiero para describir un día en el que los mercados bursátiles experimentan caídas abruptas y significativas, generalmente desencadenadas por eventos económicos, políticos o sociales que generan pánico entre los inversionistas.

¿Qué es un lunes negro y por qué hoy es uno?

El ejemplo más icónico es el Lunes Negro del 19 de octubre de 1987, cuando el índice Dow Jones en Estados Unidos cayó un 22.6% en un solo día, marcando una de las peores jornadas en la historia de Wall Street. Este tipo de eventos suele estar acompañado por una venta masiva de acciones, volatilidad extrema y temores de una recesión económica.

¿Por qué hoy es un lunes negro?

Hoy, 7 de abril de 2025, se considera un "Lunes Negro" debido a un desplome generalizado en los mercados mundiales. La causa principal parece ser la imposición de nuevos aranceles por parte del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciados el 2 de abril de 2025.

Estos aranceles, que incluyen medidas como un 54% sobre productos electrónicos chinos y un 10% general sobre importaciones a EE.UU., han desatado una guerra comercial que ha generado incertidumbre global. Los mercados asiáticos, como el Nikkei 225 de Japón (que cayó un 7-8%) y el Hang Seng de Hong Kong (con bajas de hasta un 10.37%), abrieron la jornada con pérdidas históricas. En Europa, índices como el DAX alemán y el STOXX 600 también registraron caídas significativas, superando el 7% en algunos casos.

En EE. UU., los futuros del S&P 500, Nasdaq y Dow Jones anticipan una apertura con descensos de entre el 3% y el 5%, prolongando una tendencia negativa que ya eliminó billones de dólares en valor bursátil desde el anuncio de Trump.El pánico se ha visto amplificado por factores como el temor a una recesión mundial, la interconexión de los mercados globales y la reacción en cadena de los inversores, que han comenzado a vender activos de riesgo masivamente. Este "Lunes Negro" de 2025, aunque no alcanzará necesariamente la magnitud del de 1987, refleja una crisis de confianza en la economía mundial, impulsada por las políticas arancelarias y sus repercusiones en el comercio internacional.

¿Es Donald Trump responsable del lunes negro?

¿Es Donald Trump responsable del lunes negro?

Atribuir la responsabilidad únicamente a Donald Trump sería simplificar un fenómeno complejo, pero sus acciones han jugado un papel clave en desencadenarlo. El anuncio de nuevos aranceles el 2 de abril de 2025 —un 54% sobre productos electrónicos chinos y un 10% general sobre importaciones a EE.UU.— marcó el inicio de una escalada en las tensiones comerciales globales.

Estos aranceles, parte de su política económica proteccionista tras asumir la presidencia por segunda vez, provocaron una reacción inmediata en los mercados: incertidumbre, ventas masivas y caídas abruptas en los índices bursátiles de Asia, Europa y América. Sin embargo, otros factores también contribuyen. La economía global ya venía enfrentando retos, como la inflación persistente, el ajuste de tasas de interés por parte de bancos centrales y la fragilidad en sectores como el tecnológico, altamente dependiente de cadenas de suministro chinas.

La decisión de Trump actuó como un catalizador, amplificando estas tensiones preexistentes. Los inversores, temerosos de una guerra comercial prolongada y una posible recesión, optaron por retirar capital de los mercados, lo que aceleró el desplome.

Argentina y las políticas económicas de Javier Milei en este contexto

Argentina y las políticas económicas del presidente Javier Milei enfrentan un escenario de gran complejidad, marcado por la crisis global desatada por los aranceles impuestos por Donald Trump y las reacciones en cadena en los mercados internacionales. Las políticas de Milei, centradas en el ajuste fiscal, la reducción del déficit y el control de la inflación, se ven puestas a prueba en un entorno externo e interno adverso que podría tanto amplificar sus logros como exacerbar sus costos sociales y económicos.

Argentina y las políticas económicas de Javier Milei en este contexto

Situación de Argentina en el "Lunes Negro"

El desplome de los mercados globales afecta directamente a Argentina como economía emergente dependiente del comercio internacional y vulnerable a la volatilidad financiera. Las acciones argentinas en Wall Street, como las de YPF o los bancos, probablemente reflejen esta tendencia bajista, mientras que el peso argentino podría enfrentar presiones adicionales en el mercado paralelo ("dólar blue"), a pesar de los esfuerzos del gobierno por estabilizar el tipo de cambio.

La guerra comercial iniciada por Trump golpea a Argentina en varios frentes:

  • Exportaciones: Aunque Argentina no depende tanto de EE.UU. como destino directo (alrededor del 5-7% de sus exportaciones), la desaceleración del comercio global afecta a socios clave como China y Brasil, que representan cerca del 20% y 15% de sus ventas externas, respectivamente. Productos como el petróleo - en baja - la soja, el litio y la carne podrían ver reducida su demanda o precios más bajos, como ya ocurre con el petróleo.
  • Inversión extranjera: La incertidumbre global reduce el apetito por activos de riesgo, lo que podría frenar el ingreso de capitales que Milei busca atraer con su agenda promercado.
  • Reservas y deuda: La necesidad de dólares para pagar importaciones y sostener las reservas del Banco Central se complica en un contexto de menor flujo comercial, mientras las negociaciones con el FMI podrían retrasarse si EE. UU., su principal accionista, prioriza su propia agenda económica.

Las políticas de Milei en este contexto

Desde su asunción en diciembre de 2023, Milei ha implementado un plan económico basado en tres pilares: ajuste fiscal drástico ("déficit cero"), desregulación y reducción de la inflación mediante el freno a la emisión monetaria. Hasta abril de 2025, estos son algunos de sus resultados:

  • Inflación: Bajó de niveles cercanos al 25% mensual a un 2-3% mensual a fines de 2024, un logro destacado que ha mejorado el poder adquisitivo relativo y permitido el regreso de créditos a largo plazo (como hipotecas), algo impensable en años previos.
  • Ajuste fiscal: Logró un superávit fiscal del 0.5% del PIB en 2024, tras un déficit del 4% en 2023, mediante recortes en subsidios (energía, transporte) y obra pública, aunque a costa de una recesión (PIB -2.2% en Q1 2024, -1.7% en Q2).
  • Pobreza: Aunque cayó del 53% al 38% en la segunda mitad de 2024 según el INDEC, gracias a la desaceleración inflacionaria y mejoras en asignaciones sociales, el ajuste inicial disparó la pobreza al 55% en el primer semestre, mostrando un costo social elevado.
  • Riesgo país: Se redujo de 2,500 a cerca de 748 puntos, Vovliendo a pasar los 900 a partir del crash de los aranceles. Reflejando mayor confianza de los mercados en la solvencia fiscal, pero sigue siendo alto para atraer inversión masiva.

Sin embargo, estas políticas enfrentan un desafío interno y externo imprevisto:

  • Resistencia de la oposición: El gobierno argentino ha destacado que el orden macroeconómico alcanzado (superávit fiscal, inflación controlada) permitió que el impacto del desplome global fuera menor que en crisis pasadas. Por ejemplo, en agosto de 2024, tras otro "lunes negro" global, Argentina resistió mejor que otros emergentes gracias a no haber levantado el cepo cambiario precipitadamente. De todas formas, la inestabilidad política que potencia el peronismo y kirchnerismo, lo habitual cuando no gobierna y errores no forzados propios, pueden generar más ruido en la confianza con las medidas de gobierno.
  • Vulnerabilidades: Sin embargo, la dependencia de exportaciones de materias primas y la falta de reservas robustas (pese a mejoras) limitan la capacidad de respuesta. La recesión global podría agravar la contracción económica local, mientras los recortes en gasto público dificultan un estímulo interno.
  • Oportunidades: Si Milei logra cerrar un acuerdo con el FMI en este contexto, podría obtener fondos frescos (estimados en 16,000-20,000 millones de dólares) para fortalecer las reservas y mantener la estabilidad cambiaria, proyectando una imagen de solidez ante los mercados.

Perspectivas y tensiones

El "Lunes Negro" pone a prueba la narrativa de Milei de que el ajuste y la libertad económica son el camino para salir de décadas de crisis. Por un lado, su disciplina fiscal y la baja inflación podrían posicionar a Argentina como un refugio relativo frente a la tormenta global, atrayendo inversores cuando la incertidumbre amaine. Por otro, el costo social del ajuste —con aumentos en transporte (+200%) y energía (+65-150%)— y la recesión en curso podrían erosionar su apoyo popular, especialmente si el desempleo crece ante una menor actividad económica.

En el corto plazo, la prioridad será evitar una devaluación abrupta del peso y sostener las reservas, mientras se negocia con el FMI. A mediano plazo, la clave estará en diversificar exportaciones y reducir la dependencia de socios afectados por la guerra comercial.

Las elecciones legislativas de octubre de 2025 serán un termómetro político: un buen resultado podría consolidar el rumbo de Milei, pero una economía debilitada por factores externos podría alimentar el descontento.En conclusión, Argentina bajo Milei queda en una posición ambivalente tras el "Lunes Negro": fortalecida en sus fundamentos macroeconómicos frente a crisis pasadas, pero expuesta a un mundo en turbulencia que podría retrasar su recuperación. El éxito dependerá de su capacidad para navegar este temporal sin sacrificar los avances logrados ni perder el respaldo social.