Maldivas, un encanto aISLAdo
A veces uno tiene la posibilidad de darse pequeños gustos, y es entonces que me dije quiero conocer las Islas Maldivas. ¿Y lo hice?
A veces uno tiene la posibilidad de darse pequeños gustos, y es entonces que me dije quiero conocer las Islas Maldivas ¡Y lo hice!
Photo by Recal Media / Unsplash
¡Lo haré en breve! Por lo tanto necesito ajustar información que tengo sobre la Isla. Hablando inglés sé que uno puede manejarse bien, pues el problema se presentaría -me han comentado- en una Isla llamada Malé porque habría algún cortocircuito para entenderse. ¡Veremos cómo lo sobrellevaré!
La info recabada me indica que hay muchas actividades acuáticas para realizar: snorkel, buceo o bien pesca, esta última ha sido de gran oportunidad para los maldivenses porque años atrás los habitantes vivían de esta actividad. Luego, con el paso del tiempo, el turismo comenzó a ganar terreno y hoy en día la pesca es un pasatiempo placentero.
Como imaginarán la extensión de Maldivas no es de gran inmensidad, pues visitarla tiene como un doblez: hacer turismo en una isla habitada o bien ir a una isla desierta. Eso es a gusto y piacere del turista. Una isla y sus habitantes nos hace conocer la verdadera realidad de alguien que vive lejos de la vida idílica que es la que presenta el turismo, por lo tanto desembarcar allí es ver , por ejemplo , viendo cómo se vive de la pesca y de la manufactura artesanal o bien, viviendo en su cotideaneidad.
Ahora bien, está la opción de conocer una isla desierta: eso es algo que debe pensarse bien y tener en cuenta qué es lo que más placer te da. Es decir: hay que tener en claro que es "desierta", solamente estaremos nosotros y la inmensidad del océano, descontando algo de vegetación. ¿Cómo nos transportaeremos? tal cual lo vimos en pelis: en un hidroavión o en una lancha. A decir verdad es muy óptimo para evadirse del mundo.
¡Lista para viajar!