Los mosquitos eligen a quien picar.

Hay una amplia gama de personas, desde "soy un imán para los mosquitos" hasta "nunca me pican", que sufren las picaduras de estos insectos o que nunca experimentan las ronchas que causan.

En realidad, de diez personas que asisten a una reunión al aire libre durante una noche de verano, dos terminarán mucho más picadas que el resto. Y esto no tendrá nada que ver con que se hayan olvidado de usar repelente.

Los científicos descubrieron recientemente que el 20% de las personas son particularmente "deliciosas" para los mosquitos y son picados con más frecuencia. A pesar de que aún no han descubierto una solución definitiva para esta dolencia, además de utilizar repelentes de insectos para prevenirlas, los científicos han descubierto numerosos factores internos (propios) o externos que aumentan la probabilidad de que algunos de nosotros sean picados que otros.

De qué manera deciden a quién picar los mosquitos?

El tipo de sangre, el metabolismo, el color de la ropa y el consumo de cerveza son algunos de los factores que el mosquito elige como huésped, según un artículo publicado en la revista Medical Discovery News de Estados Unidos.

“Aproximadamente el 85 por ciento de lo que te hace más deseable o menos deseable (para los mosquitos) está integrado en tu ADN”, indicó Timothy C. Winegard, profesor de historia en la Universidad de Colorado Mesa y autor del libro El mosquito: una historia humana de nuestro depredador más mortífero, publicado por la Librería Nacional de Medicina de los Estados Unidos.

Todos los mosquitos pican?

Winegard dijo que solo los mosquitos hembra pican a los humanos porque necesitan nuestra sangre para alimentar sus huevos. “Simplemente están siendo buenas mamás. Desafortunadamente, los patógenos nos vienen gratis”, destacó el experto que apuntó a la malaria, dengue, zika y la enfermedad del Nilo Occidental como algunos ejemplos de los virus que puede transmitir.

Un creciente conjunto de investigaciones ha identificado una serie de factores que parecen aumentar la probabilidad de que algunas personas se infecten con mosquitos. Algunos factores, como el tipo de sangre o la cantidad de bacterias en la piel, pueden estar bajo control de las personas, pero otros, como el color de la ropa que usa o la cantidad de cerveza que consumen, no.

Tipos de sangre.

Algunos tipos de mosquitos parecen preferir la sangre tipo 0 positiva.

En un estudio de 2019 publicado en el American Journal of Entomology, los investigadores dieron a los mosquitos una variedad de comederos con los cuatro tipos de sangre y descubrieron que, en comparación con otros comederos, los insectos prefirieron el comedero de sangre tipo O.

En 2004, otro estudio descubrió que las personas con sangre tipo O reciben mosquitos con mucha más frecuencia que las personas de otros tipos de sangre y casi el doble que las personas con sangre tipo A.

Aunque los científicos no saben por qué la sangre tipo O es tan atractiva, es posible que se deba a las proteínas o a las sustancias químicas presentes en la sangre.

Olores que atraen o ahuyentan a los mosquitos.

Investigaciones sobre las preferencias de los mosquitos han demostrado que tener un olor específico también juega un papel importante.

“El sentido del olfato es algo en lo que mucha gente no piensa mucho, pero para los mosquitos es lo primero que tienen en mente, y así es como nos cazan y descubren su objetivo preferido”, precisó el doctor Matthew DeGennaro, profesor asociado en ciencias biológicas en la Universidad Internacional de Florida que estudia la genética y el comportamiento de los mosquitos.

La mayor parte del olor corporal natural proviene de la piel, que es una mezcla de varios compuestos orgánicos. Los científicos están tratando de descubrir qué tipos de insectos atraen y repelen.

Por ejemplo, investigadores de la Universidad Rockefeller descubrieron en un estudio publicado en octubre de 2022 en la revista Cell que las personas con niveles más altos de ácido carboxílico son 100 veces más atractivas para un tipo de mosquito que las personas con niveles más bajos.

DeGennaro dice que su laboratorio también está examinando qué compuestos de los olores corporales naturales atraen a los mosquitos. “Lo que estamos descubriendo es que las personas tienen diferentes conjuntos de microbios en la piel que les hacen producir olores ligeramente diferentes, y diferentes especies de mosquitos prefieren diferentes tipos de olores”, precisó DeGennaro.

El aliento.

Los mosquitos tienen células nerviosas capaces de detectar el dióxido de carbono que se libera cuando exhalamos. Pueden detectar dióxido de carbono a más de 10 metros.

Los adultos más grandes y los niños emiten más dióxido de carbono naturalmente que los adultos más pequeños o los niños, lo que facilita la caza de mosquitos.

Embarazo.

Las mujeres embarazadas atraen más mosquitos debido a su mayor calor corporal, tasa metabólica y posiblemente su olor único. Según un estudio, las mujeres embarazadas producen más del 20 por ciento más de dióxido de carbono que las personas sin embarazo, lo que resulta en que son picadas con el doble de frecuencia que las personas sin embarazo.

“Las mujeres embarazadas pueden resultar más atractivas para los mosquitos. Hay una serie de cambios en el sistema respiratorio durante el embarazo, incluido un aumento en la cantidad de aire que se inhala y exhala. Este aumento produce más dióxido de carbono, lo que hace que una persona embarazada “sea más atractiva para los mosquitos porque los mosquitos se sienten atraídos por el dióxido de carbono”, explicó Joseph Conlon, médico entomólogo y asesor técnico de la Asociación Estadounidense para el Control de Mosquitos.

Y agregó: “Además, el embarazo significa tener una temperatura corporal más cálida que el promedio y la posibilidad de sudar más, que son señales para rastrear, aterrizar y morder, agrega. Dado que los mosquitos pueden detectar una temperatura corporal más alta y un aumento del dióxido de carbono, las personas embarazadas se convierten en blancos fáciles. Y ser un blanco fácil también significa que las personas embarazadas pueden correr un mayor riesgo de contraer enfermedades transmitidas por mosquitos que pueden afectar directamente su salud y la de su bebé en crecimiento.

Beber cerveza.

En un día caluroso, una cerveza fría puede caer bastante bien, pero puede aumentar las posibilidades de ser picado por más mosquitos.

Un estudio breve publicado en el Journal of the American Mosquito Control Association descubrió que beber una sola cerveza aumentaba la atracción de los mosquitos. En otro estudio, los investigadores franceses descubrieron que los mosquitos preferían beber una cerveza que beber un vaso de agua.

Aunque los científicos no están seguros de que, si la cerveza altera el olor del cuerpo, eleva la temperatura o atrae a los mosquitos de alguna otra manera, es recomendable aplicar un poco de repelente antes de salir a caminar al aire libre.

Evitar las picaduras de mosquitos:

Evitar áreas en donde haya mosquitos.
Colocar mosquiteros rígidos, ya sea de metal o plástico, en puertas y ventanas, asegurándose de que se encuentran intactos.

Proteger la cuna o cochecito del bebé con redecillas protectoras para mosquitos cuando permanezca en exteriores.

Vestirse con zapatos cerrados, sombreros y ropa clara, cubriendo tanto los brazos como las piernas.

Eliminar fuentes de agua estancada vaciando, cubriendo o volteando recipientes que pudieran contenerla.