Hematohidrosis: una enfermedad detrás de una divinidad.

En la biblia, particularmente en el Nuevo testamento, hay tres ocasiones en las que se hace referencia a Jesús de Nazaret, el hijo de Dios, derramando lágrimas. Se menciona en un momento de oración en el Getsemaní (Jardín de los olivos) antes de su crucifixión. Además de hacer referencia a sus lágrimas, este pasaje (Lucas 22:44) describe a Jesús sudando gotas de sangre durante su momento de agonía.

En la época, se creía que este fenómeno tenía un aspecto divino, pero pudo haber tenido un componente patológico debido a su estado de estrés.

¿Que es la Hematohidrosis?

La Hematohidrosis es una condición extremadamente rara en la que la persona afectada suda sangre como resultado de enfrentar la muerte o una situación de estrés extremo. Como se menciona en la Biblia, Jesús ya sabía de su próxima muerte en ese momento de oración.

Se ha descrito la dilatación de los capilares y la filtración de glóbulos rojos alrededor de los folículos de la piel y el pelo, aunque el mecanismo no se conoce con precisión. La comunidad científica ha hablado de la fragilidad de los vasos sanguíneos y capilares en estas personas; más que ser una condición divina, es una condición patológica causada por la ruptura de vasos sanguíneos, y liberación de sangre por los poros más cercanos al sitio afectado.

A esta condición que se le conoce como Hematohidrosis, Hemidrosis, Hematidrosis o simplemente sudar sangre; se presenta principalmente en las siguientes zonas: cabeza, frente, rostro, cuello, manos y pies.

En algunos casos también se puede sudar sangre en otras partes del cuerpo como el abdomen o debajo de las uñas, entre otras zonas.

Pocos casos (menos de 100 en todo el mundo) han sido documentados en la literatura científica, aunque pasajes religiosos o reportes en diferentes idiomas podrían aumentar el número de casos reportados, aunque no de manera significativa, por lo que se considera una patología muy rara.

La Hemolacria es una condición física en la que una persona produce lágrimas compuestas parcialmente de sangre, aunque rara. Esto puede ocurrir debido a una variedad de factores ya descritos, como infecciones oculares, tumores y daños físicos, entre otros.

Aunque no es inusual, ver a un paciente con hemolacria es impresionante, pero lo es aún más atender a un paciente con hematidrosis, lo que hace casi imposible tratar a un paciente con ambos síntomas. Sin embargo, un informe de un paciente con ambas condiciones fue descrito en 2019, lo que llamó la atención de la comunidad científica internacional. El paciente cuenta que sus episodios de ansiedad comenzaron a los 6 años de edad, provocados por crisis de ansiedad que le ocurrían durante peleas con sus hermanos o la pérdida de familiares cercanos. Además, menciona que su hermano presentaba los mismos síntomas y lamentablemente falleció en un accidente a los 14 años.

La clínica dermatológica del Dr. Julio Salas brindó atención a un paciente, quien logró secuenciar los genes para encontrar una posible causa genética y confirmar, al menos en este caso, la ausencia de divinidad.

Después de la investigación, se descubrieron cambios en genes relacionados con la matriz extracelular. Esta matriz es una red de proteínas (colágeno y proteoglicanos) y otras moléculas (carbohidratos) que rodean, sostienen y dan estructura a las células y tejidos del cuerpo. Ayuda a las células a unirse y comunicarse con sus células vecinas, también es importante en la multiplicación celular, el movimiento celular y otras funciones celulares, y participa en la formación e integridad de los vasos sanguíneos.

Los resultados anteriores indican que los vasos sanguíneos son frágiles y tienden a romperse fácilmente bajo condiciones de estrés, lo que provoca la liberación de sangre hacia los poros más cercanos, lo que se manifiesta clínicamente con sudor y lágrimas de sangre.

¿Cómo se trata la Hematohidrosis?

Hasta el momento, no se ha desarrollado un tratamiento específico para curar esta enfermedad, sin embargo, el tratamiento que sugiere para aminorar o controlar este padecimiento consiste en tomar ansiolíticos y descansar bajo prescripción médica.

Afección comparable a la Hematohidrosis.

Aparte del sudor, hay otras condiciones en las que la sangre se extrae del cuerpo sin haber sufrido una herida abierta previa, como la Hematofoliculohidrosis. En este caso, la sangre se produce a través de los folículos capilares, lo que afecta principalmente la región del cuero cabelludo.

La hemolacria, cuya característica principal es la producción de lágrimas compuestas de sangre, también está presente. Este fenómeno puede ser el resultado de patologías oculares como tumores en el aparato lagrimal, conjuntivitis severa o heridas graves; incluso puede ser el resultado de enfermedades como anemia, hipertensión arterial, hemofilia, entre otras.

De igual manera, es posible que se produzca sangrado por cavidades, tal como ocurre en las mujeres con endometriosis, quienes pueden experimentar sangre menstrual a través de los ojos, orejas, nariz y boca en lugar de los genitales. Esto se debe al crecimiento de un tejido parecido al endometrio, que recubre el útero, pero en lugares que no debería estar, como las trompas de Falopio, los ovarios y la parte externa del útero.

La historia de una mujer en Iquitos que suda por estrés

María Andrea García Shupingahua, una peruana de 32 años, la padece.

En el Hospital Regional de Loreto, la joven originaria de Iquitos ha sido diagnosticada con hematidrosis. Además de vomitar sangre, le sale por los brazos, la cabeza, manos y pies. De la nada surge. En el diálogo, lamentó que a veces no es necesario demasiado estrés, pero que ahorita es demasiado ahora.

Según Jorge Martínez, un internista de la Clínica Internacional, "la razón principal es que los vasos sanguíneos, que son capilares pequeños que rodean la glándula sudorípara, suelen romperse". "Eso migra a la glándula, que al final produce un sangrado a través de los poros", dijo.

Detalló que, aunque no hay tratamiento, es controlable. Se pueden utilizar ciertas sustancias que controlan ligeramente la contracción y dilatación de los vasos sanguíneos. Explicó que los beta bloqueadores, que son antihipertensivos, pueden ser útiles porque controlan e impiden que los pacientes tengan sangrado recurrente.

Descartó que sea una enfermedad mortal en ese sentido. En la medicina, hay sangrados menores y mayores. Según él, la principal distinción entre ellos es que los menores no siempre tendrán una anemia aguda, mientras que los mayores sí.

“Los sangrados que presentan quienes padecen hematidrosis no los condicionan, pero los autolimita por el susto que ocasiona. Ese paciente se puede sentir mal, de repente piensa que se va a desangrar, que se va a caer la hemoglobina y esto agrava su situación de estrés”, resaltó.

Sin embargo, el experto advirtió que es importante eliminar todas las razones que puedan indicar un problema de coagulación, ya sea a nivel de la piel o reumatológico.

“Definitivamente, es necesario llevar a cabo un estudio del paciente”, insistió.

Además, aclaró que, aunque no es contagioso, "puede ser un problema genético relacionado con un trastorno a nivel de la matriz extracelular". De la estructura en la que se implantan las células. Según él, “esa matriz es la que, aparentemente, tiene un problema congénito y es la que cede ante este tipo de estrés generado sobre el cuerpo”.

Otro caso documentado en Italia.

Los expertos italianos publicaron en la revista Canadian Medical Association Journal (CMAJ) el caso de un paciente de 27 años que sufre de la misma enfermedad que se mencionó en Perú.

Los médicos Roberto Maglie y Marzia Caproni informaron que las hemorragias comenzaron hace tres años y duraron entre uno y cinco minutos. Además, afirman que la enfermedad ha causado "aislamiento social" y "graves desórdenes depresivos y de pánico".

Esta enfermedad es tan poco común que solo se han registrado 28 casos en los últimos 13 años. Incluso se cree que se debe a enfermedades sistémicas, una menstruación indirecta (también conocida como Vicaria) y trastornos psicógenos.

Aunque es extremadamente inusual, no se descarta que existan más casos de personas que suden sangre. La recomendación es acudir de inmediato al médico, ya que, aunque no existe un tratamiento disponible y no es considerado mortal, la vergüenza y la mala impresión frente a los demás pueden tener un impacto negativo en la salud emocional. Esto es especialmente cierto debido a que no es posible controlar cuándo ocurren estos episodios.

¿Era el sudor hemático de Jesús de Nazaret una manifestación de su divinidad?

Es difícil de decir o negar, pero en la actualidad se sabe que algunas personas tienen alteraciones en sus genes, lo que resulta en una manifestación que muchos consideran algo divino: la liberación de sangre por los poros de la piel y las glándulas lagrimales.

Fuentes:

Azteca Noticias, Infobae, TecSience, SIPSE.com, Discovery Channel, Noticias SIN.