“Gusano digital”.
El propósito es develar los misterios de la seda más fina.
Un grupo de científicos de China han logrado descifrar el pangenoma de la cría más precisa y permite otros casos de uso de la seda.
El gusano de la seda es un insecto que posee importancia económica, fue utilizado hace más de 5.000 años. Bombyx mori (nombre científico), se ha introducido en todo el mundo, siendo de origen chino. Investigadores de ese país, han conseguido el mayor conjunto de datos del pangenoma del gusano de seda.
Investigadores de la Empresa BGI Genomics, la Universidad del Suroeste, el Laboratorio Estatal Clave de Biología del genoma del Gusano de Seda y otros socios, han alcanzado este logro. Diagramaron un conjunto de datos del pangenoma de alta resolución que representa el contenido genómico de un gusano de seda, aportando datos relevantes sobre la selección artificial y la adaptación ecológica.
Previo a realizar el estudio, los científicos manifestaron que había escasez de gusanos de seda salvajes y limitaciones técnicas de los estudios anteriores. A raíz de este inconveniente, realizaron la primera investigación que digitaliza el acervo genético de los gusanos de seda, es decir, crearon un gusano de seda digital, lo que facilitó la investigación genómica funcional, revela la cría precisa y permite establecer otros usos de la seda.
Se re secuenciaron detalladamente 1.078 gusanos de seda y se ensambló genomas de lectura larga en 545 de estas muestras generando 55,57 T de datos genómicos.
Hasta la fecha, el nuevo descubrimiento ha sido la información más completa referente a esta especie de insecto, el conjunto de datos del pangenoma contiene información referente a los genomas de seda domésticos y silvestres, y ha representado la lectura más larga de genoma en el mundo para plantas y animales.
Al mismo tiempo se han realizado estudios que abarcan distintos aspectos de esta especie como la variación genética, la estructura de la población, la selección artificial y las adaptaciones ecológicas y los rasgos económicos del gusano de seda, arrojando resultados totalmente fructíferos para el estudio.
El gusano de seda doméstico, se ha adaptado a partir del gusano de seda morera silvestre, que, con el transcurso de los años, su domesticación todavía sigue siendo una cuestión abierta porque no se dispone de pruebas bilógicas sólidas.
El material obtenido de esta investigación, sin duda alguna, representa la más rica diversidad genética de todas las principales regiones que se dedican a la cría del gusano.
Se ha descubierto que el gusano de seda doméstico se originó en China, ya que el estudio reveló que las especies endémicas de la región baja y media del Río Amarillo se distribuyen en la base de la rama de la especie.
Dentro de las pruebas arqueológicas se ha descubierto, un medio capullo excavado en 1926 en la aldea de Xiyin, en el condado de Xia, provincia de Shanxi, y una pupa de gusano de seda tallada en piedra excavada en 2019 en Shicun, en el mismo condado.
La cría tradicional de gusanos de seda tiene una historia muy larga, el análisis sistemático de las bases genéticas de la domesticación y la selección de la mejora es esencial para descubrir las cuestiones de crianza.
Se identificaron 468 genes asociados a la domesticación y 198 genes asociados a la mejora, de los cuales 264 y 185 son de nueva identificación, estos genes serán importantes objetivos candidatos para la mejora molecular del insecto.
La seda fina tiene aplicaciones únicas y un mayor valor económico, pero la base genética de la finura de la fibra seguía siendo desconocida hasta ahora. El análisis de variantes raras, determinó que los genomas de sedas finas, poseen un gen que controla la finura de estas materias y que puede detectarse en, por el contrario, los gusanos de seda domésticos producen una seda más gruesa.
“Con un muestreo y un conjunto de datos exhaustivos, combinados con una variedad de experimentos para identificar genes para su estudio potencial en el futuro, esperamos acelerar el proceso de mejora del diseño molecular del gusano de seda”, relata Shuaishuai Tai, Coautor e Investigador principal de BGI Genomics.
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Fuente. Télam, Infobae, UBA.