En las redes sociales, el escándalo de los cuadernos golpea a Cristina 2019 pero no la saca de carrera

Siempre cuesta creerlo, pero las campañas electorales arrancan mucho antes de las fechas previstas.

Así, al analizar en las redes sociales y en la Web, la performance de los principales dirigentes del peronismo con chances de pelear en las presidenciales de 2019 registra movimientos inquietantes desde mayo de este año: más de un año antes de las elecciones primarias.

Al interior del peronismo, las dos grandes figuras que vienen punteando en la visibilidad digital son la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner y el senador Miguel Ángel Pichetto.

Ambos dirigentes picaron en punta gracias a cuatro tópicos centrales: la economía, corrupción, aborto y aspiraciones presidenciales.

Si observamos el análisis comparado de la visibilidad digital de Cristina y Pichetto en las redes sociales y en la Web, se advierten los picos de presencia en las charlas virtuales, más allá de la imagen positiva y negativa de cada uno.

En mayo de este año, el debate del denominado proyecto "antitarifazo" puso en el centro de la discusión pública a la expresidenta y al senador Pichetto.

Ya en julio, el debate en las redes sociales y la Web se concentró en los problemas judiciales de Cristina Fernández.

En paralelo, la cuestión electoral empezaba a cobrar forma.

Por un lado, la exmandataria amagó con un lanzamiento por anticipado de su candidatura presidencial.

Por el otro, fue el propio Miguel Ángel Pichetto quien instó esa posibilidad, al afirmar sin inmutarse que Cristina "será candidata".

Cuadernos, a escena

La irrupción del escándalo de los cuadernos de la corrupción durante el kirchnerismo trastocó el escenario de la conversación pública en redes y en comentarios de portales, principalmente.

La saga de 8 capítulos encuadernados por el chofer Oscar Centeno pegaron de lleno en la figura de Cristina Fernández, apuntada por la Justicia como líder de una asociación ilícita junto al expresidente Néstor Kirchner para cobrar coimas a empresarios beneficiados con la obra pública.

Esto queda de manifiesto al analizar la utilización del hashtags #cuadernosk y su interrelación con otros como#ckf, #Cristina #LaLadrona, #CuadernosGates, entre otros, claramente relacionados con la figura de la expresidenta.

Pichetto, "consorte político" de Cristina

Sea por pertenencia partidaria o por oportunidad política, tanto Cristina como Miguel Ángel Pichetto aparecen ampliamente relacionados en las distintas discusiones digitales de época.

Ya sea por los avatares de la economía o el debate sobre la legalización del aborto, ambos dirigentes comparten escena.

Esto se observa, especialmente, al dimensionar el alcance del escándalo de los cuadernos de la corrupción durante el kirchnerismo.

Dentro de temática, la toma de posiciones del senador Pichetto para permitir los allanamientos en domicilios de la expresidenta como así también en la discusión sobre si debe ser desaforada o no de la Cámara Alta, lo colocan al dirigente patagónico en un incómodo y no menos visible lugar de expectativa política.

Asimismo, puede advertirse el impacto del escándalo de corrupción en la figura del dirigente peronista, en torno al proyecto de Extinción de Dominio, una herramienta legal que permitiría que el Estado se haga de los bienes de corruptos (y corruptas) apenas quede demostrado el delito (iniciativa que Pichetto viene resistiendo junto al peronismo del Senado, motivo por el cual decidieron presentar una propuesta parlamentaria alternativa).

Massa y Urtubey, todavía en boxes

Mirando hacia el escenario concreto de las elecciones de 2019, tanto Sergio Massa como Juan Manuel Urtubey aparecen en un segundo plano elocuente del debate en redes y la Web, detrás de la exmandataria y del líder parlamentario del peronismo.

Las razones del ostracismo de ambos dirigentes quedarán para el análisis político; en la discusión de las redes y de Internet, Massa y Urtubey quedan a la saga de Cristina y Pichetto; un gran dato de época político/digital.

Como curiosidad, es interesante posarse sobre la figura del gobernador de la provincia de Salta.

Juan Manuel Urtubey, siempre dispuesto a la dar la pelea presidencial, protagonizó dos episodios personales que para varios analistas políticos sirvieron para posicionar su imagen a nivel nacional.

Por un lado, su casamiento con la actriz Isabel Macedo, en septiembre de 2016. Aquella ceremonia de gran impacto mediático logró proyectarlo por fuera del tablero político, al menos durante algunas semanas.

Asimismo, el nacimiento de su hija, Isabelita, volvió a despertar el interés de los medios por su figura, siempre asociada a su esposa y artista, ferviente "mencionadora" de la cuenta de Twitter de su esposo en las redes (@UrtubeyJM).

¿Con Cristina libre o detenida?

En resumen, la pregunta más difícil por responder que tiene el peronismo es qué pasará con el futuro judicial de Cristina Fernández.

Con la expresidenta libre y en carrera, su rol solapa el protagonismo de sus eventuales rivales.

En ese sentido, desde el gobierno se enhebra la teoría político/conspirativa de una mano peronista empujando a Bonadío a ordenar la detención de Cristina y así forzar su salida de juego al interior del partido.

Paradójicamente, el principal cepo a tal posibilidad es el propio Pichetto, quien con su doctrina que desalienta el desafuero de un legislador sin sentencia firme deja bloqueada cualquier jugada parlamentaria para echar a Cristina del Senado y dejarla en las puertas de la cárcel.

Pichetto, el presidenciable (por ahora) sin Twitter

De los cuatro presidenciables mencionados en esta nota sólo uno no tiene perfil digital: Miguel Ángel Pichetto.

El dirigente rionegrino viene levantando su perfil público desde hace algunos años y cada vez resulta más conocido para el público en general que no suele tener demasiados conocimientos sobre la dinámica política.

Pichetto logró trascendencia a fuerza de protagonismo parlamentario y palabras no menos filosas en declaraciones públicas.

Sin dudas, su catapulta mediática más importante fueron las declaraciones sobre los inmigrantes que llegan al país, endilgándoles responsabilidad por el delito en la Argentina y por el agravamiento de la pobreza.

Pero sin dudas la consolidación de Pichetto en la discusión pública de las redes sociales y de la Web fue durante este 2018.

Como describíamos, su protagonismo en los principales debates parlamentarios, a caballo de la falta de liderazgo del peronismo, lo fue instalando en un lugar de centralidad de la agenda política, digitalizada, con la camiseta peronista.

Todo esto con la particularidad de que el senador patagónico no tiene una cuenta propia en Twitter.

Consultado para esta nota sobre la posibilidad del desembarco oficial de Pichetto en el mundo virtual, su entorno lanzó como respuesta fue un escueto "no por ahora", lo cual deja abierta la puerta a la posibilidad.

En tiempos de debates digitalizados por las redes e Internet, sin dudas al senador le queda poco margen para seguir en el ostracismo virtual.

Porque, parafraseando la traducción del verbo to be del inglés, para ser candidato, presidenciable y con chances, hay que "ser, estar, parecer o semejar" en las redes sociales y en la Web.