Brasil, comienza la campaña más caliente en años.
Bolsonaro desde la trágica esquina que en el 2018 fue apuñalado, mientras que Lula lo hizo al pie de la simbólica fábrica que lo vio crecer en los 70´s.
Arranca la campaña presidencial en Brasil, Jair Bolsonaro, quien busca la reelección, y Luis Ignacio Lula da Silva, que quiere volver al poder, son protagonistas de la contienda más polarizada en décadas en el país sudamericano, Bolsonaro encabezó una concentración en la misma esquina en la que fue apuñalado en la campaña de 2018 en Juiz de Fora, en el estado de Minas Gerais, "es imposible no emocionarse al volver a esta ciudad, el recuerdo que llevo conmigo desde renacimiento y de que mi vida fue perdonada por el, por nuestro Creador para que pudiera ser presidente de la República y mejorar nuestra patria" expresó Bolsonaro.
En tanto, el acto de Lula también estuvo cargado de simbolismo al visitar una fábrica automotora en Sao Bernardo do campo, en la región metropolitana de Sao Paulo, donde se forjó como líder sindical en los años 70, "Le debo prácticamente todo en mi vida, todo lo que aprendí en la política e incluso en la derrota y en las victorias, se lo debo a esta categoría extraordinaria llamada "Metalúrgicos do ABC".
La precampaña estuvo marcada por los constantes cuestionamientos que ha hecho Bolsonaro sin pruebas del sistema de voto electrónico, sus críticas han despertado temores de que no reconozca una eventual derrota. Lula, que recuperó sus derechos políticos en 2021 tras la anulación de sus condenas en la mega-causa anticorrupción "Lava Jato", sigue liderando los sondeos, aunque el actual mandatario parece recortar distancias.
En la última encuesta, Lula reúne 44% de las intenciones de voto en la primera vuelta del 2 de octubre frente a un 32% de Bolsonaro. La principal preocupación de los brasileños es la situación económica, marcada en los últimos años por altos niveles de desempleo y una inflación que ha restado popularidad a Bolsonaro. Pero el Presidente espera mejorar sus números con las recientes bajas de los precios de los combustibles y el aumento de ayudas sociales.
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Fuente: DW español, El País, Infobae, Swissinfo, El Destape.