Barcelona. En la Ciudad Gaudí
Hay ciudades que te enamoran, y ciudades que te maravillan. Barcelona, la ciudad de Gaudí. Es una de ellas.
Hay ciudades que te enamoran, y ciudades que te maravillan. Barcelona, la ciudad de Gaudí. Es una de ellas.
Antigua, moderna, futurista, avant garde. En resumen Ecléctica. Con playas, con cerros, exquisitamente urbanizada hacia arriba y caótica hacia el mar. Rebelde como el espíritu catalán.
Como a todas las ciudades que se quiere conocer bien, caminarla es obligatorio para disfrutarla. Sin embargo, si se cuenta con pocos días y se necesita optimizar el tiempo. El City Sightseeing Bus es una gran opción. Con circuitos muy interesantes que tocan todos los puntos que se deben ver en una estadía corta.
En un día bien planificado, se pueden realizar los tres circuitos, Rojo, verde y azul; con el objetivo de llevarse una rápida pero también insuficiente probada de Barcelona.
Perdiendo el miedo en Barcelona
Si están por viajar a Barcelona y estuvieron investigando revisiones en otros sitios. Casi seguro leyeron sobre tener cuidado con billetera, teléfono móvil y carteras en las Ramblas y otros barrios como el Raval.
No se dejen intimidar. Con tomar cualquiera de las medidas mínimas de seguridad que tomarían en cualquier ciudad, no deberían tener ningún problema. Si son de Buenos Aires en particular, no necesitan saber ni hacer nada que no hagan en su vida habitual.
¿Cómo fue mi experiencia en Barcelona con el tema Seguridad? A mí, en particular, las advertencias me parecieron exageradas. Caminé a cualquier hora por diversos barrios. 0 problemas. Pero ya saben como es esto. Pudo haber sido suerte. Sigo opinando que no presten demasiada atención al tema y solo no hagan nada que no harían en su lugar de origen.
¿Que me gustó de Barcelona?
Lo resumiría en una palabra. ECLECTICISMO.
La forma en que Gótico, Medieval, Modernismo Catalán y Contemporáneo se mezclan. La planificación de sus calles más modernas. La forma en la que mira al mar.
Rebelde, Bohemia, Liberal.
Una ciudad que da gusto caminar y disfrutar.
¡Hasta luego Barcelona!
Si tengo que decir algo desfavorable de nuestra corta estadía en Barcelona, es que fue muy corta. De paso solo dos noches como excusa para tomar el Crucero Norwigian Spirit; la conclusión final es que tuvo gusto a poco.
¡Hasta luego Barcelona! Nos vemos pronto por mucho más.