"Alfredo Yabrán", ¿Está vivo?
Alfredo Yabrán fue un importante empresario argentino dueño entre otras cosas de la empresa postal Oca, una persona que se perdió en las sombras, le gustó el anonimato y fue recién en 1995 cuando el entonces Ministro de Economía Domingo Cavallo, le dedicó un fuerte discurso acusándolo en la Cámara de Diputados que lideró una mafia enquistada de poder, inmediatamente Yabrán le respondió.
Lo que leyó por calumnias e injurias, hasta ese tiempo el empresario, siempre manteniendo el anonimato para casi todo, tenía una fuerte vinculación con el Gobierno de Menem, presidente en ese entonces, pero lo de caballo fue un golpe muy bajo que lo puso en foco del periodismo y esto no le gustó para nada, Yabrán siempre decía, sacarme una foto a mí, es como pegarme un tiro en la cabeza. Nadie tenía fotos de él, ni siquiera el propio servicio de inteligencia podía hacerse de ellas, Alfredo tenía su propia seguridad y tenían la misión de protegerlo en todo momento y un plus que jamás filtraría ninguna foto suya, usaran los ojos siempre abiertos, buscando a cualquier periodista que intente acercarse, aunque era también algo difícil de saber en donde se encontró el empresario.
Su posición era siempre un misterio, todos los medios estaban tras él, las defensas tomaron mucho impulso y el tema se comenzó a llevar a cabo a diarios y revistas, Yabrán ya no era tan invisible como siempre, pero hubo un hecho que quizás marcó el final de la historia de este hombre, el 24/01/1997, José Luis Cabezas y el periodista Gabriel Michi, fueron a una fiesta organizada por Oscar Andreani, ellos llegaron en un auto Ford Fiesta blanco, a eso de las 4:00 AM , Gabriel se apartó y José Luis se quedó a hacer algunas fotos más, ésa misma mañana apareció el Ford Fiesta, prendido fuego y dentro estaba José Luis Cabezas calcinado esposado y con 2 disparos de calibre 32 en su cabeza, tenía 36 años, estaba casado y tenía una pequeña hija de pocos meses de edad.
Pero para saber el porqué de esta situación que se dio hay que retroceder un tiempo atrás, un día de febrero de 1996, un año antes del asesinato, José Luis junto a Gabriel Michi, estaban investigando algunas irregularidades que se estaban dando con Alfredo Yabrán en Pinamar. Aún nadie tenía una foto de él y por fin la oportunidad se estaba dando, Alfredo estaba pasando unas tranquilas vacaciones en la playa y se incomodó al extremo cuando se encontró con esta foto tan emblemática de la revista noticias en su tapa. José Luis Cabezas creó la fotografía que nadie tenía esa foto que paradójicamente fue el fin de su carrera y el fin de su propia vida.
El jefe de seguridad de Alfredo, Gregorio Ríos, recibió una orden muy clara, esto no podía pasar nuevamente y el mensaje que habría que dar, tenía que ser certero y directo, Yabrán jamás olvidará dicen, fué así que probablemente un año después de la foto, luego de esta fiesta con Oscar Andreani, fue secuestrado, esposado, torturado al extremo y rociado con combustible dentro del auto, el hecho terminó cuando prendieron fuego el vehículo con José adentro, el mensaje estaba entregado.
Posteriores investigaciones dicen que el jefe de seguridad de Don Alfredo, Ríos, se puso en contacto con el policía bonaerense Gustavo Prellezo, quien a su vez se vinculó con otra banda de delincuentes llamada “Los horneros”, y ellos fueron quienes ejecutaron la orden de secuestrar y asesinar al periodista ese 25 de Enero de 1997.
Miguel Coso, Comisario retirado de Gualeguaychú, fue uno de los que ingresó al cuarto, cuenta que al ingresar lo primero que notaron fue humo procedente del disparo, el hombre tirado boca abajo sobre la escopeta le tomó los signos vitales y estaba muerto, tenía toda la cabeza hinchada, los perdigones no habían salido para afuera a partir de acá comenzaron a surgir diferentes hipótesis sobre lo que habría pasado, Alfredo se encierra en una de las habitaciones de la estancia, los oficiales registran el lugar revisando todo y fue exactamente a las 12:45 del mediodía que al intentar abrir este cuarto un estruendo rompe el esquema de la situación, ingresan y efectivamente, el hombre se había disparado con una escopeta 12'70.directamente en su boca,
Algunos comentan que escapó a la Patagonia, o quizás, a una isla del Caribe donde nadie lo busque jamás, nunca se revelaron imágenes del cadáver, eso es verdad.
También se conocen rumores de los vecinos del lugar, que comentan que camionetas 4x4, abandonan la estancia de una forma muy sospechosa y justo misteriosamente antes de la llegada de la policía. la verdad es que, más allá de toda sospecha y comentarios sueltos, nunca se pudo probar estas teorías, la realidad es que, al día de hoy, nadie está detenido por el asesinato de este periodista y justamente por esta razón que todos los 25 de enero, el periodismo, su familia y todo un país repite, “No se olviden de Cabezas”.