Alerta roja por la presencia de cianobacterias.
Además, siete adicionales son calificados como riesgos. La Subsecretaría de Recursos Hídricos ha preparado una posible expansión en caso de que la temperatura aumente. ¿Qué efectos pueden tener en la salud y cuáles son las medidas preventivas?
La Subsecretaría de Recursos Hídricos del Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos de la Provincia de Buenos Aires confirmó que hay más municipios en Buenos Aires afectados por las cianobacterias. De esta manera, actualmente hay cuatro en situación de alerta roja. Los municipios en cuestión son Lezama, Lobos, San Miguel del Monte y Pehuajó, y otros siete están en situación de alerta naranja. Las áreas mencionadas se agregan al embalse Ramos Mexía (El Chocón) ubicado en Neuquén.
“En el marco del Programa de Gestión Integral de Cianobacterias, la Subsecretaría de Recursos Hídricos del Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos de la Provincia sigue trabajando con los municipios que poseen cuerpos de agua para trabajar en la detección de posibles floraciones de cianobacterias y así trabajar en la prevención hacia la comunidad”, comenzó el comunicado emitido por el ente bonaerense.
Asimismo, advirtieron que la presencia de estas algas tóxicas podría ampliarse, debido a que el Servicio Meteorológico Nacional “indica que durante los próximos días puede haber un aumento de la temperatura”. “Eso trae aparejado la posibilidad de que se incremente la aparición de cianobacterias”, aseguraron.
El "Sistema de Alerta Temprana por Cianobacterias", que funciona mediante el CIANOSEMÁFORO y cuenta con la participación de 31 municipios, es responsable de esta actualización que se ha difundido en las últimas horas.
En ese sentido, desde el ente bonaerense aseguraron que los municipios de Lezama, Lobos, San Miguel del Monte, y Pehuajó se encuentran con Alerta Roja. Mientras que Alberti, Chacabuco, Chascomús, General Madariaga, Lezama, Trenque Lauquen, y Monte Hermoso están Alerta Naranja. “En ambos casos se aplica la bandera sanitaria por cianobacterias”, aclararon.
“La actualización de este mapa tiene como principal objetivo que bañistas y deportistas no pongan en riesgo su salud en aguas recreativas”, señalaron en el comunicado, por lo cual indicaron que esta bandera “indica que en la playa y en el agua existe un riesgo potencial para la salud”.
Qué son las cianobacterias.
“Las cianobacterias son un grupo de bacterias muy primitivas, que comenzaron a aumentar en la década del 60, se las conoce también como un tipo de algas verdes y azules, que actúan sobre los excrementos que quedan asentados en el lecho por la faltante de agua, por estancamiento, por efectos de la actividad agropecuaria y por el intenso calor. Producen una gran cantidad de nutrientes, que se disuelven en el agua y el calor favorece a su multiplicación”, explicó la doctora Stella Maris Cuevas (MN 81701).
En palabras de la experta, este fenómeno tiene lugar en “ecosistemas de agua quieta o con poco movimiento”, las cuales favorecen el desarrollo de estos organismos unicelulares, que son “capaces de realizar fotosíntesis oxigénica, captan dióxido de carbono y por transformación química liberan oxígeno y otras sustancias como hidrógeno o sulfuro (produciendo una gran oxidación), a la atmósfera, provocando un cambio en el medio ambiente”.
“Estos microorganismos pueden causar en las personas que ingresan al agua para refrescarse, alteraciones en el estado de salud, comprometiendo en especial la piel, pues puede producir eritema (enrojecimiento), picor o algún tipo de dermatitis, en la piel que reviste el conducto auditivo externo (CAE), o en la conjuntiva de los ojos”, indicó médica otorrinolaringóloga y experta en olfato.
Además, resaltó que “puede comprometerse las fosas nasales con cierta congestión. Es común en niños que juegan en la orilla que manifiesten una gastroenterocolitis que puede llegar a producirles deshidratación. En algunas oportunidades pueden aparecer manifestaciones más severas de tipo hepatotóxicas, es decir afecciones en el hígado, o neurológicas, cuya primera manifestación puede ser intenso dolor de cabeza”.
La expresidenta de la Asociación de Otorrinolaringología de la Ciudad de Buenos Aires (AOCBA) recalcó: “Es importante advertir que estos organismos pueden afectar la salud por lo que se recomienda evitar el ingreso a estos lugares y / o en caso de hacerlo al egreso inmediatamente enjuagar el cuerpo entero”.
Cómo evitar el contacto con las cianobacterias.
En primer lugar, debe mantenerse fuera del agua si:
Si hay anuncios que indican que el área está cerrada. Esto puede ser el resultado de que el agua no es adecuada para nadar.
Si presenta un color diferente al habitual, puede parecer más turbio o tener un olor desagradable. Esto puede ser una señal de que hay más microorganismos que lo normal en el agua.
Si se ve una masa verde brillante que parece una mancha de pintura o una masa espesa marrón en la orilla. Esto podría indicar la floración de algas nocivas que causan enfermedades en el agua.
Después de una lluvia fuerte, los desperdicios se pueden drenar en el área afectada.
Si se observan tuberías que drenan el agua, particularmente después de fuertes tormentas o lluvias después de largos períodos de sequía.
Si hay diarrea. Si otros nadadores tragan agua contaminada, los gérmenes pueden enfermarlos.
Si hay un corte o herida abierta. Utilice un vendaje a prueba de agua para cubrirlo completamente en caso de ingresar.
Los niños y las mascotas requieren una atención especial. Las personas no deben bañarse si hay un alto riesgo.
Algunas aclaraciones sobre las cianobacterias.
Se trata de organismos diminutos que poseen clorofila, lo que les permite realizar fotosíntesis. Debido a esto, también se les conoce como "algas verdes-azules", que pueden encontrarse en aguas dulces y/o saladas. Algunas de estas cianobacterias producen toxinas, lo que puede ser un problema tanto para la salud humana como para la salud ambiental.
Estos organismos viven en diferentes concentraciones de agua. Un crecimiento muy rápido o explosivo de ellas se conoce como "floración" o "floración" cianobacteriana. Cuando sucede algo de este tipo, representa un riesgo potencial para la salud. Aunque no todas las cianobacterias son tóxicas, es posible que estén presentes las que son potencialmente tóxicas cuando hay floración.
Este crecimiento ocurre durante períodos de altas temperaturas, días de poco viento y olor y abundante luz solar. También aumentan sus nutrientes, como el fósforo y el nitrógeno. La intervención humana acelera el proceso natural que libera residuos ricos en nitrógeno y fósforo en las aguas, como resultado del uso intensivo de fertilizantes o del aumento de los efluentes industriales.
Las principales formas de exposición incluyen la ingesta directa (que puede ocurrir de manera involuntaria durante un ejercicio en agua), el contacto directo con la piel e incluso a través del líquido de diálisis. La cantidad de agua que se bebe (en una sola ingesta o en varias pequeñas ingestas) aumenta el riego.
Los ancianos, las embarazadas, los niños, las personas con inmunodeprimidas y los pescadores o guardavidas son los más susceptibles y estas toxinas. Los perros son muy susceptibles y estos microorganismos y los síntomas aparecen rápidamente.
Los síntomas principales incluyen náuseas, vómitos o diarrea; mal gusto en la boca; letargo, dolor de cabeza o fiebre; sangre en la orina u orina oscura; disminución del apetito; contracción muscular (que en altas dosis puede causar parálisis muscular progresiva); dificultad respiratoria; inflamaciones en la piel (como eccemas, picores o ampollas) y conjuntivitis.
La observación atenta del agua y la arena es la principal medida de prevención. Cuando veamos partículas de color verde azulado, marrón-verdoso, rojizo o verde brillante flotando sobre el agua, debemos evitar estar en contacto con el agua o la arena.
Fuente:
Defensoría del Pueblo CABA, Infobae, Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, LA NACIÓN, CRHIAM.